A todo o nada: siete actores que hicieron sacrificios extremos a la hora de componer un personaje
Un gran personaje requiere de mucha entrega y esfuerzo. Antes de empezar a filmar una película o serie, los actores dedican un largo tiempo a la preparación de su papel, ya sea intentando entende...
Un gran personaje requiere de mucha entrega y esfuerzo. Antes de empezar a filmar una película o serie, los actores dedican un largo tiempo a la preparación de su papel, ya sea intentando entender la mente o psicología de su personaje o cambiando drásticamente su apariencia para lograr mayor veracidad a la hora de interpretarlo. Incluso, muchos recurren a la actuación de método; una técnica desarrollada por el director de teatro ruso Konstantin Stanislavski a comienzos del siglo XX, que consiste en apelar a la memoria sensorial y a ejercicios emocionales para atravesar las experiencias de sus personajes.
Mientras que algunos han decidido aislarse del mundo exterior para componer su rol, otros han preferido vivir como ellos, adoptando sus modos de vida y sus trabajos. En esta nota, siete actores que se han sometido a sacrificios extremos para lograr una mayor credibilidad en la pantalla.
Robert Pattinson: mudanza a los suburbiosEl actor que saltó a la fama con Crepúsculo asumió un gran desafío cuando fue elegido para protagonizar el film Good Time: Viviendo al límite. Para ponerse en la piel del marginal Connie Nikas, Robert Pattinson decidió mudarse a Harlem y vivir durante dos meses en un departamento en un sótano. Además, consiguió trabajo en un lavadero de autos. “No abrí las cortinas ni cambié las sábanas en todo el tiempo que estuve allí y dormía con la ropa puesta. Había una mujer que vivía arriba y no dejaba de intentar averiguar qué pasaba, porque pensaba que yo era un bicho raro”, le confesó el intérprete al portal News.com.au mientras aclaraba que durante esas semanas su dieta fue a base de latas de atún, salsa picante y café. La película fue aclamada por la crítica, que destacó la particular actuación de Pattinson.
Jamie Dornan: persecución callejeraA pesar de que siempre lo veamos como un galán, Jamie Dornan ha demostrado su versatilidad actoral. Prueba de ello fue su papel en la serie The Fall, donde interpreta al asesino en serie Paul Spector. Para ponerse en la mente y el cuerpo de este depredador sexual que tiene una doble vida, el actor corrió algunos riesgos de los cuales se arrepiente. “Un día seguí a una mujer que se bajaba del tren para ver qué se sentía perseguir a alguien. Mantuve las distancias. La seguí un par de esquinas y luego me pregunté: ‘¿Qué estoy haciendo?’”, reveló en una entrevista con Los Ángeles Times, aceptando que su actitud no fue la correcta. “Fue un proceso interesante para averiguar por qué el personaje perseguiría a una chica por la calle, qué estaría tratando de averiguar”, agregó justificando su accionar.
Hilary Swank: cambio de identidadUno de los papeles más difíciles de su carrera fue el que hizo en la película Los muchachos no lloran, donde Hilary Swank interpretó a un hombre transgénero. Para lograr mayor credibilidad, la actriz vivió como hombre durante varias semanas previas al rodaje. “Sabía que si no podía salir a la calle y hacerme pasar por chico, no quería hacer la película. Sabía que estaría cometiendo una grave injusticia, así que salí y viví mi vida como chico durante cuatro semanas. Sentí una necesidad imperiosa de ser sincera con la historia”, confesó la actriz que tuvo que vendarse el pecho para lograr su misión. Lo hizo tan bien que hasta sus vecinos creían que ese muchacho que entraba y salía de su casa era el hermano de Swank.
Heath Ledger: aislado del exteriorPara adentrarse en la piscología del Guasón, papel que interpretó en el film Batman: El caballero de la noche, el recordado Heath Ledger decidió perder contacto con el exterior durante un mes. “Estuve sentado en una habitación de hotel en Londres durante aproximadamente un mes. Me encerré, escribí un pequeño diario y experimenté con las voces. Era importante tratar de encontrar una voz y una risa un tanto icónicas”, reveló el actor, que falleció en enero de 2008, en en una entrevista. Su actuación fue reconocida con un Oscar póstumo en la categoría de Mejor Actor de Reparto.
Ryan Gosling y Michelle Williams: convivencia obligadaCómo olvidar a la pareja que Michelle Williams y Ryan Gosling encarnaron en Blue Valentine. Lo que el público no sabe es que detrás de esta dupla explosiva hubo un gran compromiso profesional para lograr esa química en pantalla. Los actores convivieron durante un mes en la casa donde se filmó la película para captar el impacto emocional de una relación que se desmoronaba. “Fue difícil. Durante el mes, tratamos de desmantelar esta cosa que habíamos estado construyendo. Todos trabajamos muy duro para crear esta parte de la historia de amor, cuando se están enamorando. Queríamos que pareciera genuino, real y verdadero. Y pasamos todo este tiempo construyéndolo, y luego tuvimos que derribarlo”, le dijo Gosling al programa Fresh Air de NPR -el sistema de radio pública de los EE.UU.-, mientras confesaba que en este film logró olvidarse que estaba actuando. Por su parte, Williams confesó que nunca había tenido ese tipo de conexión con otro actor.
Shia LaBeouf: desafiando el dolorShia LaBeouf es uno de los actores que más se la juega a la hora de componer un personaje. Fue en la película bélica Corazones de hierro donde interpretó a un soldado creyente) que el intérprete tomó algunas medidas drásticas que sorprendieron tanto al público como a sus compañeros de elenco. Además de no bañarse durante todo el rodaje, el actor decidió sacarse una muela para hacer más creíble su papel. Y si bien logró su objetivo, le costó varias semanas encontrar un odontólogo que acepte hacer el trabajo sin un motivo médico. “Fue todo un reto sacarla porque no es tan sencillo ir y decir: ‘Hola, quiero que me saquen esta muela’. Todos me decían: ‘¡¿Qué?! Eso no tiene ningún sentido médico’”, contó en su paso por Jimmy Kimmel Live! Finalmente, LaBeouf encontró un dentista que accedió a su pedido: “No me hizo muchas preguntas. Me dijo: ‘¿Cuál? No hay problema’”, agregó, entre risas. Dicen que la cicatriz que lució en la mayor parte del film también fue obra suya y no del departamento de maquillaje. “Es uno de los mejores actores que he visto”, confesó su coprotagonista, Brad Pitt.
Ashton Kutcher: una dieta peligrosaEn su caso, la actuación de método lo llevó al hospital. Es que cuando a Ashton Kutcher le tocó interpretar a Steve Jobs en su película autobiográfica, el actor quiso imitar su estilo de vida a la perfección, incluyendo sus hábitos alimenticios que se centraban en una dieta frugívora en la cual consumía frutas, semillas y cereales. “Empecé a beber jugo de zanahoria sin parar, todo el día. Dos semanas antes de empezar a rodar, de repente me empezó a doler la espalda y, durante la noche, fue empeorando cada vez más. Acabé en el hospital porque mi páncreas estaba completamente descontrolado”, reveló el actor en USA Today. Sus niveles en el páncreas estaban completamente alterados, algo que preocupó a Kutcher. “Entonces me asusté y pensé: ‘¡Dios mío, me he convertido en Steve Jobs!’. ¡Este es el fantasma de Steve Jobs apoderándose de mi páncreas!”, confesó sobre el gurú de la tecnología que falleció en 2011 debido a un cáncer de páncreas.