Cuánta lluvia necesita Nueva Jersey para que termine la sequía
Nueva Jersey atraviesa una de las sequías má...
Nueva Jersey atraviesa una de las sequías más graves de los últimos años, con el 50,2% del estado atravesando una situación extrema y el restante 49,8% en condiciones severas, según el monitoreo del gobierno nacional. Esta ausencia de lluvia puso en crisis recursos clave como ríos, embalses y acuíferos subterráneos, especialmente en el río Delaware, donde el caudal depende de embalses regulados.
¿Una tormenta grande en Nueva Jersey es la solución?Aunque podría parecer que una tormenta masiva solucionaría el problema, los expertos descartan esta opción. David Robinson, climatólogo estatal, señaló a NJ.com que la caída de precipitaciones intensas en poco tiempo, como las de huracanes pasados, generarían inundaciones en lugar de reponer las aguas subterráneas.
Para contrarrestar el déficit, en realidad se necesitan meses de lluvias constantes y moderadas, incluyendo nieve durante el invierno, que permitan recargar lentamente las fuentes de agua.
Otro especialista en el tema como Michael Silva, que es meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional, explicó que la sequía endureció notablemente los suelos y dificultó la absorción de agua durante lluvias intensas. Es por eso que múltiples episodios de lluvias ligeras a lo largo de semanas o meses serían más efectivos para aliviar la crisis hídrica, en vez de una tormenta fuerte.
Las perspectivas a corto plazo por la sequía en Nueva JerseySe espera que un próximo sistema de tormentas deje entre 50,8 y 76,2 milímetros de lluvia en la región norte del estado y hasta 38,1 milímetros en el sur. Pese a que esto representa un buen avance, no será suficiente para resolver la sequía. Según dijo a NJ.com Mat Gerbush, climatólogo asistente en Rutgers, estas precipitaciones marcan el inicio de lo que podría ser un patrón más húmedo, pero aún queda mucho por recorrer en materia de mejoras.
A pesar de los esfuerzos y las expectativas de un cambio en las condiciones climáticas, los especialistas coinciden en que revertir los efectos de la sequía será un proceso lento y prolongado. Se necesitarán varios meses con precipitaciones superiores a lo habitual para que los arroyos, ríos, embalses y acuíferos subterráneos vuelvan a sus niveles normales.
Este desarrollo no solo requiere lluvias moderadas, sino también nevadas significativas en invierno, que al derretirse, ayudarán a recargar las fuentes de agua. Aunque el pronóstico muestra señales esperanzadoras, todavía es incierto saber si las próximas semanas traerán el volumen de lluvias necesario.
Mientras tanto, los expertos insisten en que cualquier precipitación, por mínima que sea, representa un pequeño paso hacia la recuperación. La situación sigue siendo crítica, pero con una combinación de tiempo, patrones climáticos favorables y gestión eficiente del agua, el estado podrá superar esta crisis.