De Oasis y Shakira a Silvio Rodríguez: la abundante y variada oferta de shows musicales hasta fin de año
Si hubiera que buscar una semana de lo que resta del año para representar la cartelera musical de Buenos Aires, la próxima sería la ideal. Solo en el escenario del Movistar Arena, entre martes y...
Si hubiera que buscar una semana de lo que resta del año para representar la cartelera musical de Buenos Aires, la próxima sería la ideal. Solo en el escenario del Movistar Arena, entre martes y viernes estarán la diva pop Katy Perry, el veterano de voz inigualable Lionel Richie, el inoxidable Iggy Pop y un crédito local de la escena urbana, Cazzu. El chileno Beto Cuevas paseará su voz por el Ópera y en el teatro de enfrente, el Gran Rex, tocará Pat Metheny, una de las mayores eminencias de la guitarra del jazz. Para esta semana y, por si fuera poco, los amantes del punk iban a tener una versión de los Sex Pistols en la catedral rockera, el Estadio Obras, pero tuvo que ser suspendida porque Steve Jones se fracturó la muñeca.
Todo en cuatro o cinco días locos. Y hay mucho más: hay una agenda variada entre esas estrellas que aterrizan en el Movistar Arena y el Uniclub (donde este martes tocará, por primera vez en la Argentina, A Place To Bury Strangers), el C Art Media, que trae una propuesta de culto (Teenage Fanclub, el mismo día) o el palermitano Bebop, que ofrecerá una exquisitez jazzística (la cantante Julia Moscardini y el pianista Ernesto Jodos, un par de días después), entre una buena selección de visitas extrajeras, programadas para septiembre.
Cuando de muestra basta un botón, lo expuesto fue apenas una semana de las más de quince que restan hasta fin de año. La oferta de música no decae a pesar de que, puertas adentro, en las oficinas de los productores se habla del retraimiento de la demanda; recesión, como en la mayoría de los rubros de economía argentina. Lo que se vende con facilidad son los nombres: Shakira, que, a menos de 10 meses de su última visita en el Campo Argentino de Polo, cerrará su tour latinoamericano con conciertos en Vélez (deberíamos decir dos, aunque quizás sean más) o María Becerra, que volverá a River en diciembre próximo. El resto de la actividad musical, según datos de algunas productoras, se vio resentida en cuanto a venta de tickets.
En el último año y medio, los shows de estadio (recitales en espacios abiertos y la actividad en “arenas”) habría caído un 20 por ciento, mientras que las salas pequeñas (con capacidad de entre 50 y 500 personas) la baja alcanzaría al 35 por ciento.
Aun así, la oferta no se detiene. Desde el cierre del Luna Park, el Movistar Arena es el único espacio para más de 10.000 asistentes y atrae a la mayor parte de la oferta de ese segmento. Allí estarán en días consecutivos Katy Perry, Lionel Richie e Iggy Pop. Pero, además, la grilla cuenta con ocho funciones en total de Erreway y conciertos de Fatboy Slim, Los Palmeras con El Puma Rodríguez, Rod Stewart, Juanes, Il Volo, Gilberto Gil, Morrissey, Calamaro, Divididos, Melendi, Marco Antonio Solís. Hasta Silvio Rodríguez (con tres conciertos que dará en octubre, ya agotados) figura entre los más de cincuenta grupos y solistas que pasarán hasta fines de diciembre por ese escenario.
Por supuesto que habrá recitales en River (Kendrick Lamar y Oasis estarán allí) y Vélez. Y también aparece Huracán como una plaza que convoca: luego del show de Green Day, allí están fichados los Guns N’ Roses.
La reincidencia es un fenómeno que este año se acentúa. Luego de una gira por el país, Miguel Mateos se dio cuenta de que podría agregar una segunda fecha en el Movistar Arena y por eso repetirá la retrospectiva de sus álbumes de principios de los ochenta, el 6 de diciembre. María Becerra, que pasó por el Monumental en 2024, volverá con dos funciones en diciembre.
Igual es el caso de Airbag (con una actuación agendada el 5 de octubre) que, de un tiempo a esta parte, está absolutamente convertida en una banda de estadios. Por otro lado, el fenómeno Shakira, que jamás decae. A los conciertos que dio este año en el Campo de Polo, dentro del Tour Las mujeres ya no lloran, sumará las de Vélez (por ahora 8 y 9 de diciembre) para cerrar el tramo sudamericano de esta gira. Y no deja de ser curioso el caso de Toto; a la decana banda californiana no le alcanzó la única función que dio en noviembre del año pasado, por eso regresará a finales de 2025 de manera recargada. El concierto que dará el 13 de diciembre en el Campo de Polo será en compañía de otro veterano del rubro, Christopher Cross.
RevivalEl ataque ochentoso (y el revival en general) sigue siendo potente este año. Además de Toto y Cross, los nostálgicos que peinan canas podrán también disfrutar del gran Lionel, UB40, Rod Stewart, Kenny G, Los Plateros, Billy Idol, Morrissey, Gino Vanelli y el baterista Stewart Copeland, que subirá al escenario del Gran Rex con versiones muy particulares de los clásicos de The Police.
El crossover lírico dirá presente con Il Volo, Il Divo y especialmente, Andrea Bocelli. El tenor italiano programó dos conciertos, uno en el Teatro Colón y otro en el Hipódromo de Palermo.
En cuanto a los precios de las entradas, teniendo en cuenta la brecha cada vez más notoria entre ingresos y precios de productos y servicios en general, es posible que las cifras de los tickets para shows dejen a muchos a fuera, o hagan a los más osados pensar en planes de cuotas de tarjeta a más largo plazo. Por otro lado, a pesar de que esos precios traducidos a dólares sigan sonando elevados, no difieren demasiado de lo que se pide por shows en lugares muy alejados de la Argentina.
“Si bien hay una caída en la venta de entradas, respecto de lo que solíamos tener, se mantiene una gran oferta de shows de todos los estilos y para todos los públicos, esto hace que la gente tenga que elegir. Por otro lado, los productores tenemos oportunidades que no podemos dejar pasar”, explica Belén Canzobre, directora de Operaciones de Fenix Entertainment.
Desde su oficina, da cuenta de la variedad de propuestas que hoy se consumen mucho en la Argentina. Luego de la gran producción que la firma hizo para el regreso de Luis Miguel a los escenarios de todo el continente, los casos de éxito como éste siguen funcionando, y de este modo se demuestra que los nombres de ciertos artistas tienen el mayor peso para que esto suceda.
“Si entrás a la página del Movistar Arena vas a ver que hay pocos días libres”, dice Canzobre, y también señala que si bien en el formato Arena no hay muchas ofertas, los espacios abiertos muestran alternativas a las de River y Vélez, con el estadio de Huracán, el Parque de la Ciudad, el Campo Argentino de Polo y Parque Sarmiento. “Lo que ahora estamos viendo es mucha cantidad en poco tiempo. Hoy es un esfuerzo para la gente pagar un ticket. Pero es muy atinado gastar el dinero en cosas que a uno le hagan bien, no solo conciertos. El entretenimiento tiene que ser parte de nuestra vida. Nosotros seguimos apostando a eso, no solo a conciertos sino a lugares donde la gente va a pasarla bien.”
Si bien lo que más puede convocar suele venir del mundo de la música pop, hay datos para sorprenderse. Por ejemplo, la productora señala las entradas para bandas como la metalera californiana Avenged Sevenfold, tiene 13.000 tickets para su show en Buenos Aires y todavía queda más de un mes para la actuación. A System Of Down le tomó apenas un día y medio para agotar los tickets de su último concierto en Vélez, en mayo pasado.
Para llegar a ver a sus artistas preferidos, buena parte del público se encuentra frente a la necesidad de elegir qué es lo que más le gusta, cuando el bolsillo no alcanza para todo, y se aprovechan las promociones bancarias, en tiempos de “preventa exclusiva”.
Sebastián Palacios -responsable de la productora Ceroveinticinco que tiene en su agenda porteña de 2025 a artistas y bandas de culto, Kamasi Washington, Snarky Puppy, Stewart Copeland y Pat Metheny- relativiza la baja del consumo. O, en realidad, la define en otros términos. “Hay clima recesivo, no hay dudas, pero tickets se venden. Tal vez el consumidor elige qué ir a ver. Si en otro momento quizá podía ir a dos shows, ahora solo va a uno. El tema económico es curioso porque con un dólar bajo, hoy llegás antes al punto de equilibrio de cualquier show en comparación a tres años atrás”.
La clave está en qué tanto gusta un artista y qué tan seguido viene a la Argentina para marcar las diferencias: “Me sigo apoyando en el argumento de que si el artista gusta, la propuesta es interesante, distinta, o hace mucho que no viene, no hay diferencia de demanda con otras épocas”.
Mientras que, por un lado, el axioma “hay que pasar el invierno” sigue vigente más que nunca, en pocos días comienza una primavera plagada de shows hasta fin de año. Y la agenda 2026 ya está abierta, y va desde los recitales de Ricardo Arjona hasta un Lollapalooza que ya tiene una grilla completa, encabezada por figuras jóvenes, como Sabrina Carpenter y Chappell Roan, y sus abonos a la venta.