Gestiona tus pensamientos
En la mente humana habitan pensamientos que son agradables, pero también pensamientos que hacen daño y resultan totalmente invasivos. Te invito a considerar algunas de estas ideas negativas que m...
En la mente humana habitan pensamientos que son agradables, pero también pensamientos que hacen daño y resultan totalmente invasivos. Te invito a considerar algunas de estas ideas negativas que mucha gente suele tener a diario, incluso sin ser consciente de ello:
Nada me sale bien.
Yo nunca gano.
¿Alguna vez lograré algo de lo que quiero?
No soy bueno/a para nada.
Como podrás ver, se trata de formas de pensamiento absolutistas: esas que se basan en la idea de que todo es “blanco o negro”, sin posibilidad de matices. Quienes razonan así suelen tener grandes dificultades para reconocer sus errores, porque sienten que todo debe ser perfecto. De modo que, cuando algo no sale como lo esperaban, se frustran con facilidad y caen en la tristeza y la desilusión.
A esto se suma que muchas personas mantienen la creencia de que los demás —ya sean familiares, amigos, gobernantes, educadores o empleadores— son los responsables de que su vida no funcione como quisieran. Esta mirada los coloca en un lugar de víctimas permanentes: víctimas de todo y de todos.
Entonces, ¿cuál es el principal obstáculo que podemos encontrarnos para avanzar en la vida? ¡Nosotros mismos! Para no caer en el papel de víctima, debemos entender que, dentro de cada uno de nosotros, tiene lugar una batalla entre lo que deseamos y el temor a que nada de eso se materialice. Por eso es tan importante aprender a liderar nuestra mente, porque allí se encuentra la causa profunda de muchas de las dificultades que enfrentamos a diario. Y en este punto, te invito a hacer una pausa y a responderte con total honestidad:
¿Sos el/la líder de tu propia mente; o tu mente te controla por completo sin que hagas nada para evitarlo?
Una de las señales más comunes de que uno no es capaz de gestionar su mundo mental es el hecho de “rumiar” un pensamiento (una idea) durante todo el día sin detenerse. Lo único que hace la persona es pensar, lo cual le provoca muchísimo cansancio. Por eso, para evitar esta rumiación es fundamental administrar nuestros pensamientos. ¿Y cómo lo hacemos? Reemplazando esas ideas negativas que incluyen los “siempres” y los “nuncas” por ideas positivas que nos nutran y nos permitan construir una realidad mejor.
Te doy un ejemplo de este tipo de ideas para que te animes a elaborar las tuyas propias: En la vida, voy a ganar (me va a ir bien); y también voy a perder (no me va a ir bien).
Toda vez que accionamos, que decidimos algo, vamos a ganar algo y a perder algo. Nadie lo gana todo, y nadie lo pierde todo. Comprender esto es liberador y nos ayuda a madurar emocionalmente y a disfrutar de la vida, aún frente a un aparente fracaso, sabiendo que perder y ganar es parte de la vida y del camino de aprendizaje que todos hemos deberemos transitar.
Fuente: https://www.lanacion.com.ar/lifestyle/en-las-redes/gestiona-tus-pensamientos-nid08122025/