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¿Limpiar tus suculentas? Un gesto que parece amoroso pero puede matarlas

Hay plantas que piden cariño, y otras que, claramente, nos invitan a mantener cierta distancia. Entre estas últimas están muchos cactus y suculentas que están recubiertos por una capa blanca, c...

¿Limpiar tus suculentas? Un gesto que parece amoroso pero puede matarlas

Hay plantas que piden cariño, y otras que, claramente, nos invitan a mantener cierta distancia. Entre estas últimas están muchos cactus y suculentas que están recubiertos por una capa blanca, c...

Hay plantas que piden cariño, y otras que, claramente, nos invitan a mantener cierta distancia. Entre estas últimas están muchos cactus y suculentas que están recubiertos por una capa blanca, casi empolvada, que conviene no tocar.

Esa película blanquecina —a veces apenas un velo, otras veces un auténtico manto— no es polvo ni hongos: es una sofisticada herramienta de supervivencia diseñada por la planta.

El ingeniero agrónomo Sebastián Ojeda lo explica así: “Es la misma cera que cubre arándanos, uvas y las hojas de muchas plantas. Un lípido vegetal, sólido a temperatura ambiente, producido por las células de la epidermis. Como en suculentas las cosas siempre son más intensas, la vamos a encontrar cubriendo hojas y tallos en capas tan gruesas que las hace ver completamente blancas; es una respuesta evolutiva a las exigencias de un ambiente seco y de gran insolación.”

Esa cera —conocida como pruina— es mucho más que un detalle estético. Actúa como un escudo natural que ayuda a que la planta mantenga su hidratación en ambientes extremos.

La vida en zonas desérticas no ofrece segundas oportunidades y cada gota de agua cuenta, cada mecanismo para retenerla significa supervivencia

Según Ojeda, “la epidermis resulta una armadura que las defiende de la desecación, la radiación y de daños mecánicos. En suculentas, la epidermis tiene varias capas de células, interrumpidas por pocos estomas ubicados en el envés de las hojas, encriptados al fondo de fosas. Y por fuera, además, aparece la capa de pruina.”

¿Para qué sirve?

Ese recubrimiento blanquecino funciona como filtro solar, reflejando gran parte de la radiación solar e impidiendo que la planta se queme o pierda agua en exceso. También es una barrera contra insectos y ácaros ya que dificulta que se instalen o perforen la epidermis. Además, es una capa antitranspirante que reduce al mínimo la evaporación en condiciones extremas.

Prohibido tocar o limpiar

Por eso, cuando acariciamos o limpiamos esa polvareda blanca pensando que es suciedad, en realidad estamos eliminando parte del sistema defensivo de la suculenta. Y no se regenera con facilidad: donde se pierde, queda ausente para siempre. El resultado puede ser una planta más vulnerable al sol, al calor o a las plagas.

Ojeda menciona cuáles son las suculentas con mayor poder de producir pruina: Echeveria laui, E. colorata, Pachyphytum oviferum, Sedum suaveolens, Dudleya pulverulenta, D. brittonii, D. gnoma, Kalanchoe pumila y Stenocactus beneckei.

“Ojo, el impacto de las gotas de lluvia y el viento arrastran la pruina. Y las patas de los pajaritos también quedan marcadas”, aclara el ingeniero agrónomo. Los cactus y suculentas con pruina necesitan que no los toquemos. Esa capa blanca es su estrategia para vivir donde casi nada puede hacerlo.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/revista-jardin/limpiar-tus-suculentas-un-gesto-que-parece-amoroso-pero-puede-matarlas-nid19122025/

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