Qué pasa en Europa con las pistolas de agua y las protestas
Un clima de creciente tensión recorre varias ciudades de Europa. Los residentes de las principales urbes, cansados del impacto del turismo descontrolado, ...
Un clima de creciente tensión recorre varias ciudades de Europa. Los residentes de las principales urbes, cansados del impacto del turismo descontrolado, alzan su voz y toman las calles. Los cascos históricos se convierten escenarios de reclamo para quienes habitan esos lugares durante todo el año y un elemento llamativo emerge en las protestas recientes.
¿Qué sucede con las pistolas de agua en las protestas europeas?En las primeras manifestaciones de este tipo, desarrolladas en julio en Barcelona, algunos activistas llevaban pistolas de agua para refrescarse y, en un momento, las dirigieron hacia los turistas. El recurso tuvo gran adhesión, y se convirtió en un símbolo de este tipo de protestas.
Durante el último reclamo, ocurrido este domingo, se congregó a unas 1000 personas, y algunos participantes rociaron a turistas que recorrían la zona. Los manifestantes portaban las versiones más sencillas de estas pistolas, que lanzan un chorro delgado a corta distancia.
Lourdes Sánchez, una manifestante, explicó que el arma de juguete “es un signo de que estamos cansadas del negocio del turismo que está convirtiendo este país en un parque de atracciones”. Para Laurens Schocher, arquitecto de 46 años, el objetivo era atraer más atención a la causa: “No creo que los turistas lo entiendan. Pienso que la intención es enviar un mensaje a las autoridades”.
Barcelona, epicentro de la movilización contra el turismo masivoBajo la consigna “Sus vacaciones, mi miseria”, manifestantes de la alianza Sur de Europa contra la Turistificación (SET) recorrieron un bulevar de lujo. La policía impidió su avance hacia la Sagrada Familia. En el camino, dejaron pegatinas con el lema “Tourist Go Home!”, y el dibujo de una pistola de agua.
Andreu Martínez, administrativo de 42 años, afirmó: “Barcelona ha sido entregada a los turistas. Esta es una lucha para devolvérsela a sus residentes”. Denunció que su alquiler subió más del 30% y su barrio cambió de modo radical.
Qué otras ciudades sostienen este reclamoEl descontento se extiende por el sur de Europa. Además de Barcelona, hubo concentraciones en Palma de Mallorca (unas 5000 personas), Granada, Ibiza, San Sebastián y Málaga. En Venecia, activistas desplegaron un cartel frente a hoteles en construcción. La crisis habitacional es el motor central de las quejas.
España, con 48 millones de habitantes, recibió un récord de 94 millones de turistas en 2024. El gobierno español ordenó el mes pasado a Airbnb retirar casi 66.000 anuncios de alojamientos ilegales. Barcelona anunció que prohibirá el alquiler turístico de viviendas desde 2028, lo que eliminará 10.000 licencias.
Qué paso en París respecto al turismoMientras las calles protestaban, el Museo del Louvre en París cerró el lunes 16 de junio por una huelga espontánea de su personal. Empleados de sala, seguridad y boletería se negaron a trabajar por sobrecarga laboral y falta de personal, en condiciones que calificaron de “insostenibles”.
“Es el lamento de la Mona Lisa aquí afuera”, comentó Kevin Ward, un turista estadounidense. El museo recibió 8,7 millones de visitantes en 2023, más del doble de su capacidad. La sala de la Mona Lisa recibe hasta 20.000 personas diarias. “No ves una pintura. Ves codos y teléfonos”, resumió una visitante coreana.
Este contenido fue producido por un equipo de LA NACION con la asistencia de la IA.