Sorpresa en la UBA. Espectáculos comerciales sobre Navidad podrían interferir en la actividad en Ciudad Universitaria
En plena época de entregas, exámene finales y graduaciones, la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (Fadu) de la Universidad de Buenos Aires (UBA) anunció que su funcionamiento se verá...
En plena época de entregas, exámene finales y graduaciones, la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (Fadu) de la Universidad de Buenos Aires (UBA) anunció que su funcionamiento se verá afectado por actividades culturales comerciales entre el 11 y el 18 de diciembre. Algunas cátedras optaron por modificar sus horarios y desde el Centro de Estudiantes consideraron que este tipo de eventos son “incompatibles con la cursada y la vida académica” y presentaron sus quejas ante el Consejo Superior. Reclaman que la que debe prevalecer en ese ámbito de Ciudad Universitaria es la actividad educativa.
Durante esos días en el Campo de Deportes de Ciudad Universitaria realizarán el espectáculo “Una Navidad inolvidable” de Disney, desde las 20. Desde la mañana y hasta las 16, la circulación vehicular y de colectivos será normal en esa zona porteña. A partir de esa hora, los colectivos ya no podrán ingresar. Se dispondrán combis para trasladar a los peatones que lo necesiten porque la última parada para los colectivos que suelen ingresar en el predio será en el pabellón 1. El ingreso vehicular será únicamente por la avenida Costanera y, según la fecha, variará el estacionamiento gratuito dispuesto para alumnos y docentes.
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La Cátedra Gabriele de Diseño, por ejemplo, informó en las últimas horas que adelantarán el cierre del ciclo lectivo, con la muestra de trabajos de todas las cursadas y las entregas de las notas porque el horario programado por esa asignatura coincidía con una de las funciones del espectáculo comercial ajeno a la FADU.
“Entendemos que la realización de este evento en horario académico entorpecerá el correcto desempeño de las actividades pensadas para esa jornada, generando demoras en los accesos, sonidos intrusivos y colapso en los estacionamientos”, explicaron en la comunicación de esa cátedra que difundieron entre sus alumnos.
Ante la consulta de LA NACION, el sector de comunicación de la FADU contestó que estará “abierta y cumpliendo con las actividades previstas” y compartieron la publicación oficial que detalla los cambios en Ciudad Universitaria por el evento de Disney. Por las repercusiones negativas que tuvo el mensaje en las redes sociales, se limitaron los comentarios. Señalaron, además, que no tienen jurisdicción sobre Ciudad Universitaria ni vínculos con los eventos programados.
Desde el rectorado de la UBA, liderado por Ricardo Gelpi, en tanto, confirmaron que los predios se alquilan y que el ingreso económico, aunque no precisaron el monto, es para la universidad. Apuntaron, además, que será utilizado para gastos que antes corrían por cuenta del gobierno nacional.
“Se va a usar para diferentes gastos. Entre ellos, obras de mantenimiento, infraestructura de Ciudad Universitaria. Todas las obras que antes eran financiadas por el gobierno nacional están frenadas. Y también para otros gastos, como por ejemplo, para resolver un problema de mantenimiento de los aires acondicionados en el edificio de Cero Infinito que eran gastos que antes corrían por cuenta del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación. Y eso lo terminó pagando el rectorado con fondos propios”, detallaron a LA NACION.
Por último, apuntaron que las empresas que contratan el predio, además del alquiler, se encargan de todos los gastos que trae aparejada esa actividad comercial, como la seguridad.
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Florencia Boveri, una de las presidentas electas del Centro de Estudiantes de FADU, marcó que no es la primera vez que sucede una actividad ajena al ámbito académico en Ciudad Universitaria, pero puntualizó que antes los eventos se realizaban durante el verano. Ahora se empezó a alquilar el predio de forma simultánea con el desarrollo del ciclo lectivo.
“Si alquilar este predio va a ser una resolución que empieza a tomar el rectorado, pero va a impactar en las cursadas, se tendría que armar algún plan de contingencia. La última vez que hubo recital fue un sábado de noviembre. Los estudiantes y los docentes que llegaron a la mañana para sus cursadas se encontraron con que la seguridad de Ciudad Universitaria, que maneja una empresa privada, no los dejó ingresar. La reja del tren también estaba cerrada y no hubo ninguna comunicación al respecto”, señaló.
En ese sentido, Boveri contó que plantearon esta situación en reiteradas oportunidades ante el Consejo Directivo. “Ahora la facultad comunicó cómo va a ser el funcionamiento durante los días del evento aclarando cómo va a ser el ingreso, algo que veníamos pidiendo que ocurriera. Había preocupación también porque durante esos días hay mesas de exámenes finales. Aunque la facultad comunica cómo va a ser el ingreso o hasta dónde van a poder entrar, queremos que efectivamente se pueda garantizar que los estudiantes y los docentes lleguen a sus respectivos exámenes finales. Que no haya inconvenientes para rendir y, que si llegan tarde los docentes también lo puedan contemplar”, dijo.
“Siempre hay una preocupación en torno a qué se destina ese dinero. Si la UBA toma estas resoluciones porque el presupuesto no alcanza, necesitamos saber a qué lo va a destinar. Sobre todo cuando se está barajando qué va a pasar con el curso de verano. Todavía estamos esperando la respuesta de qué es lo que va a ocurrir con el presupuesto y si va a garantizar los salarios docentes durante el curso de verano”, consideró sobre el uso de los fondos que se obtendrían con este tipo de actividades comerciales. La dirigente estudiantil también manifestó la preocupación por el impacto sonoro y de movimiento de personas que puede llegar a afectar a la reserva ecológica aledaña.
No son pocos los estudiantes que tendrán otra vez que enfrentar una situación como la que se dará a partir del miércoles próximo. “No sé cómo voy a llegar en horario a rendir mis exámenes finales, cuando tendré otra vez que caminar bastante porque yo voy en colectivo a Ciudad Universitaria”, planteó a LA NACION un joven que está a pocas materias de concluir la carrera de Arquitectura, que evitó identificarse por temor a inconvenientes con la FADU.
“A mí me cambiaron la fecha de cierre de actas porque coincidía con el horario del espectáculo. El propio docente justificó el cambio y nos contó se había quejado a las autoridades de la facultad”, dijo angustiada una estudiante de Diseño Gráfico, al plantear su preocupación porque su familia viene del interior y no sabe si podrá acompañarla en su egreso.